Ser productor musical, es una de las maneras de encontrar tu propio negocio, cobrando después tus derechos de autor. Siempre será la manera de poder descubrir lo que te gusta hacer, las melodías soñadas que tú nunca pudiste cantar pero que en voz de otros quedan geniales ¡y crear trabajos conjuntos muy interesantes!
Siempre podrás crear las letras así como las melodías y llevarse al menos el 30% de derechos de autor de cada autor mínimo (dependiendo de cuantos autores haya habido en la creación de la canción) Un productor también puede tener varios ayudantes o arreglistas, entre los cuales también tendrá que compartir los derechos de autor.
La compensación que obtendrás, dependerá de cuanto de famosa se vuelva la obra. Asi que ¡imagina! podrías ser un artista y a la vez ayudar a otros creadores. La música podrás componerla para vender sola, como puro ocio o también para programas, para videojuegos, para series...